LOS TRATAMIENTOS NATURALES PARA CUIDAR LA PIEL

La piel envejece, como todos los órganos del cuerpo humano. Lo que se puede hacer es retrasar los signos de envejecimiento llevando un estilo de vida saludable. 

Hay que tomar sol con precaución: no exponerse en las horas cercanas al mediodía, usar pantallas de protección solar y anteojos con filtro solar.

La alimentación habitual debe contener los nutrientes esenciales. Se ha comprobado que los agentes antioxidantes evitan el daño celular al controlar la producción de radicales libres, las moléculas que oxidan las células. Si bien algunos de los antioxidantes son sintetizados por células de los tejidos, muchos no pueden producirse y deben incorporarse con los alimentos: el beta caroteno, las vitaminas C y E, el selenio. Estas sustancias antioxidantes se encuentran fundamentalmente en frutas y verduras frescas, en especial crudas. Asimismo, la dieta se puede suplementar para aumentar las defensas antioxidantes.

Todos los procesos que incrementan la producción de radicales libres provocan enfermedades, entre ellas daños en la piel. Resultan nocivos: la toxicomanías como el alcohol y el tabaco, la contaminación ambiental, las radiaciones solares, las dietas inadecuadas en cuanto a falta de nutrientes y/o excesos de grasas. Junto con una alimentación acorde a la edad se debe llevar a cabo una actividad física en forma regular, que permita tonificar y flexibilizar los músculos, fortalecer el aparato óseo, mejorar

el sistema cardio-respiratorio, beneficiar la oxigenación.

Con los cuidados naturales que acabamos de mencionar se retrasará el envejecimiento cutáneo, a no dudarlo. A la par, se puede ayudar con cremas y aplicaciones cosméticas que contengan ingredientes tales como: ácido retinoico, ácido hialurónico, coenzima Q-10, ácido lipóico, gel de DHEA, elastina, colágeno, péptidos de cobre, kinetina. Los antioxidantes que se incorporan a través de los alimentos también están sintetizados en productos cosméticos anti-edad, con la incorporación de vitaminas C y E, semillas de uva, aceite de oliva, miel, rosa mosqueta, aloe vera, extracto de té verde, camote.

La piel del rostro y el cuello necesitan tener cuidados diarios especiales: limpieza, tonificación, hidratación y nutrición. Por las noches, un sueño reparador de al menos ocho horas ayudará a oxigenar los poros.  Las ojeras y bolsas debajo de los ojos pueden evitarse simplemente con un buen descanso. Además de dormir, hay que buscar recursos para aprender a sobrellevar de la mejor manera las presiones y tensiones de cada día.

En síntesis, se puede cuidar la piel de manera natural y efectiva, sin necesidad de recurrir a tratamientos costosos. Adherir a un estilo de vida saludable evitará el envejecimiento prematuro de la piel, al tiempo que mejorarán todas las funciones orgánicas.

Actualmente existen tratamientos no invasivos con los que puede mejorar la situación actual de su rostro y cuello de manera natural y muy simple. Muchos lo han llamado "Lifting Sin Cirugía".

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